sábado, 28 de septiembre de 2013

ANTECEDENTES HISTORICOS DE LA PSICOLOGIA EN EMERGENCIAS Y DESASTRES

ANTECEDENTES HISTORICOS


La psicología en emergencias y desastres se sustenta en un amplio bagaje de investigaciones y constructos teóricos que datan desde principios del siglo XX y que han ido evolucionando desde los estudios eminentemente descriptivos e individuales hasta trabajos de corte sociológico y estadísticamente significativos hasta la propuesta de técnicas específicas de intervención, a continuación presentaremos una muy breve síntesis de algunos trabajos realizados con el único propósito de que el lector se de una idea de los diversos aportes realizados en esta nueva especialidad.

LOS INICIOS, ENFOQUES DESCRIPTIVOS, CLINICOS-PSIQUIATRICOS

El interés por el estudio del comportamiento humano en situaciones de emergencias y desastres podemos decir que se remonta a principios de siglo con el trabajo de Eduard Stierlin (1909) de Zurique el cual investigo a 21 sobrevivientes de un accidente en una mina en 1906 y a 135 personas dos meses después del terremoto de Messina Italia en 1908.

Sin embargo el estudio que se considera pionero es del Médico psiquiatra E. Lindermann (1944) EU el cual trabajo con los sobrevivientes y sus familias de las víctimas del incendio del Club Nocturno Coconut Grove en Boston.
Su informe clínico sobre los síntomas psicológicos de los sobrevivientes se convirtió en la piedra angular para las teorizaciones subsecuentes sobre el proceso del duelo.

Fue precisamente que partiendo de estos principios que Gerald Caplan integrante también del Massachusetts General Hospital y del Harvard School of Public Health, que formulo el significado de la crisis en la vida.

Las investigaciones descriptivas van descubriendo posteriormente que las reacciones de las víctimas no son iguales durante el impacto del evento y posterior a este en este sentido Friedman y Linn (1957) EU, trabajando con los sobrevivientes del barco "Andrea Dorian" describe que al tratar con víctimas de sucesos traumáticos se debe de tener en cuenta sus diferentes respuesta a las fases de "Choque inicial" y la "Recuperación" en una situación de desastre.

Lifton Robert (1967) EU, empieza a describir la conducta que se presenta en las fases o periodos posteriores al impacto del desastre iniciando su inquietud con el estudio de los problemas psicológicos a largo plazo que se presentaron después del bombardeo atómico en Hiroshima.

La Asociación de Psiquiatría Americana (1970) publica un manual de "Primeros Auxilios Psicológicos en casos de Catástrofes" el cual es traducido y adaptado en el Perú por el Medico Psiquiatra Baltazar Caravedo, Asesor en Salud Mental de la Dirección General de Servicios Integrados de Salud del Ministerio de Salud del Perú; en el cual se describen diversos tipos de reacciones clásicas a los desastres así mismo se exponen los principios básicos que se deben de tener en cuenta para la ayuda a las personas "perturbadas emocionalmente".

EL ENFOQUE SOCIOLOGICO Y PSICOSOCIAL

Entre 1950 a 1954 el Consejo de investigación de la opinión publica realizo una investigación orientada al estudio del comportamiento humano en situaciones de desastre, entre los resultados obtenidos contra todo tipo de creencia se describe que el pánico no es la conducta típica esperada, ante esta situación el gobierno de los EU por intermedio de la Academia Nacional de Ciencias entre 1953 a 1963 realiza también un estudio similar llegando a iguales resultados.

Este enfoque no puede dejar de estar presente el nombre del Prof.Henry Quarantelli director del Disaster Research Center establecido en 1963 en la Universidad Estatal de Ohio USA.; dicho centro a realizado a lo largo de 41 años descubrimientos que proceden de más de 500 estudios de campo. Sus trabajos son fructíferos destacando una obra clásica publicada en 1959 "The Nature and Conditions of Panic"; desde esa fecha asta la actualidad no hay trabajo por el presentado en el cual no se exponga que el pánico como conducta típica de la población es una creencia generalizada, al igual que la conducta antisocial, la dependencia.

Erikson (1976) EU en su investigación realizada en la inundación de Búfalo Creek llamo "SEGUNDO DESASTRE" a las consecuencias de tipo emocional que se derivan de la desorganización social y física de una comunidad por la acción de un desastre natural.

Las investigaciones en el campo sociológico se han extendido al estudio de los grupos sobrevivientes en las primeras horas del impacto de un desastre, influidas por los trabajos del Dr. Quaranteli uno de estos estudios es la Investigación realizada en el vecindario de Analco, Guadalajara, México, en el cual se produjo una explosión de gas el 22 de Abril de 1992.

Se corroboro los hallazgos de la investigación de Norris Johnson (1987) y Baker (1960) sobre el comportamiento de la gente en situaciones extremas.....las víctimas bajo las condiciones tan difíciles como las de ser enterradas vivas, a veces en peligro inminente de muerte, continúan siendo seres sociales y los sobrevivientes se organizan en función de las redes sociales preexistentes.

 


MODELOS DE RESPUESTA


Los primeros esfuerzos se realizan con los damnificados del Terremoto de Managua- Nicaragua en 1972, cuando un psicólogo y un psiquiatra, viajan en 1973 a Nicaragua con la finalidad de desarrollar un proyecto de salud mental para los damnificados,

En Enero de 1982 una tormenta inunda la Costa de California, originando que más de 100 familias quedaran sin hogar, al termino de varios días se puso en marcha el proyecto COPE (Counseling Ordinary People in Emergencies) que coordino los servicios de más de 100 profesionales particulares en salud mental, con los recursos de los gobiernos federal y local, trabajando durante más de un año, proporcionando asesoramiento individual y en grupo sin costo alguno para el que lo solicitara.

El 19 de Setiembre de 1985 se produjo un violento terremoto en la Ciudad de México causando la muerte de unas 5,000 personas aproximadamente, ante esta realidad la facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de México, con asesoramiento Israelí, El Instituto Mexicano de psicoanálisis y el Instituto Mexicano de seguridad Social dieron inicio a un programa de intervención en crisis con el propósito de ofrecer apoyo psicológico a las víctima y damnificados de la tragedia


El 13 de Noviembre de 1985 del Volcán del Nevado del Ruiz hizo erupción arrasando al poblado de Armero en Colombia causando un saldo de 22,000 muertos y 5,000 heridos, en Agosto de 1986 el Ministerio de salud de Colombia con el asesoramiento de la OPS establecieron un programa de Atención Primaria en salud Mental para víctimas de desastres contando con el concurso del Dr Bruno Lima y la Dra. Raquel Cohen.

En 1989 a consecuencia del terremoto de Loma Prieta en California la Asociación de Psicología de California con el apoyo de la Asociación de Psicología Americana desarrollaron un proyecto en 1991 con la posibilidad de establecer una red nacional de psicología para dar servicios y ayuda a las víctimas y trabajadores en situaciones de desastre; esta iniciativa tubo su presentación formal con el entrenamiento de psicólogos para trabajar directamente con la Cruz roja Americana, con una certificación luego de un entrenamiento de dos días que los califica como elegibles para participar conjuntamente con la CRA en sus esfuerzos de ayuda; desde 1992 aparecen Asociaciones de Psicología en 32 estados y provincias con la participación de la APA y la CRA presidiendo los desarrollos de los planes de respuesta, cinco de esas asociaciones han programado tener un plan para desastres que permitan la movilización de una red de psicólogos para casos de desastres.

LA EXPERIENCIA NACIONAL

En nuestro país el pionero en el estudio del comportamiento humano en desastres fue el Dr. Raúl Jerí quien con un grupo de médicos del Hospital central de policía se constituyó en los días subsiguientes al terremoto de Huaraz en 1970 a las zonas más afectadas por el aluvión posterior, en sus conclusiones de su trabajo investigativo "Problemas de conducta en los desastres" describe las perturbaciones psicológicas observadas en el la zona del terremoto y la importancia de tratarlas rápidamente; considiendo con los postulados de Kinston y Rosser 1974 que opinaban sobre la necesidad de llevar profesionales en salud mental rápidamente al área del desastre.

Durante la Década de los 80 específicamente el 20 de julio de 1981 en el IPAE (Instituto Peruano de Administración de Empresas) el autor comienza a difundir los trabajos del Dr. Jerí y las recomendaciones del "Manual de Primeros auxilios Psicológicos en casos de desastres de la Asociación de Psiquiatría Americana difundidos en 1972 por la revista militar del Perú, continuándose en diferentes Instituciones, empresas y Centros Hospitalarios de Lima.

Así mismo se realizan algunas investigaciones de corte descriptivo en el terremoto de Rioja en 1991, la inundación del Río Rimac un año después en 1996, con los equipos de primera respuesta que participaron en la recuperación de los cuerpos del accidente del avión Faucett en 1996 durante el impacto del fenómeno de “El Niño” 97-98


BASES TEORICAS

El conocimiento, comprensión e interpretación de las reacciones psicológicas de las víctimas sean estas como sujetos individuales o en su conjunto como colectivo de una sociedad se basan en un conjunto de constructos teóricos que van desde el modelo explicativo del estrés basado en las respuestas psicológicas de los individuos durante situaciones de desastres o eventos traumáticos elaborado por Janis (1954), pasando por los descubrimientos clásicos de Selye y su Síndrome General de Adaptación(1976), el enfoque taxonómico de las consecuencias del estrés de Cox (1978), que abarca los efectos subjetivos, conductuales, cognoscitivos, fisiológicos y organizacionales, hasta los últimos descubrimientos del Estrés Trauma y su capacidad para el cambio del contenido bioquímico cerebral (Jhon Everlin, 1997).

Otra de las columnas vertebrales que sustentan la estrategias de la intervención en emergencias y desastres tiene que ver con la teoría de la crisis de Gerald Caplan (1964),Baldwin (1979), Lazarus (1980), Slaikeu (1984) entre otros y dentro de la teoría general de la crisis el concepto de las “crisis circunstanciales de la vida” descrito por Lidermann (1944) y Karl Slaikeu (1988) que la describe por su carácter de ser inesperada, tener calidad de urgencia, tener un impacto potencial sobre comunidades enteras y e incluir los conceptos de peligro y oportunidad, todos estos elementos son comunes a las situaciones de emergencias y desastres. Así mimo junto con los conceptos de la crisis estan los de las teorías sobre el manejo del duelo (Kubeler-Ross 1969),la experiencia del trabajo con pacientes terminales víctimas de la erupción volcánica de Armero en Colombia ( Isa Fonnergra 1985), el trabajo con los deudos de las víctimas del atentado a la colonia Judía en Argentina(Jacinto Imbar 1997).

Complementando estos conceptos estan los postulados de clasificación de las víctimas sostenido por Taylor y Frazer (1981-1987) los cuales conceptúan como víctimas de primer grado a las que sufren el impacto directo de las emergencias o desastres, sufriendo perdidas materiales o daño físico, las víctimas secundarias serían los familiares o amigos de las anteriores, las víctimas de tercer grado serian los integrantes de los equipos de primera respuesta, las víctimas de cuarto grado sería la comunidad que se ve afectada en su conjunto, las víctimas de quinto grado las personas que se enteran de los sucesos por medio de los medios de comunicación y las víctimas de sexto grado son aquellas que no se encontraban en el lugar de los acontecimientos por diferentes motivos en ellos son los sentimientos de culpa los principales los principales causantes de los problemas psicológicos.


Desde el punto de vista posicosocial estan los aportes de los conceptos del “soporte social” o “Redes de soporte social” y su importancia para ayudar a las personas a superara situaciones de crisis y facilitar la rehabilitación y reconstrucción posterior a un desastre Turner (1983), Sarason (1983), Rook y Dooley (1985), Lefcourt (1984), Mitchell (1983), Darío Páez (1986), entre otros. 


OBJETO DE ESTUDIO 

El objeto de estudio de la Psicología en emergencias y desastres esta en función a los conceptos teóricos anteriormente planteados y son las víctimas en sus seis amplias categorías y en función a los grupos etarios a los que pertenecen así como los grupos poblacionales involucrados en cada una de las tres fases de los desastres y en cada una de sus etapas interelacionadas.

TECNICAS DE INTERVENCION

La psicología de emergencias y desastres viene utilizando estrategias de intervención psicológica adaptadas para la ayuda a las víctimas en toda su amplia categorías pudiéndose mencionar algunas de ellas: 

•  Primeros auxilios psicológicos
•  Terapia de juego para niños en albergues, escuelas o centros comunales
•  Manejo psicológico del duelo en emergencias y desastres
•  Técnicas de Debrifing, Defusing y desmovilización psicológica para el manejo de incidentes críticos
•  Técnicas de afrontamiento del estrés para la prevención del síndrome de Bournut
•  Terapia y dinámica de grupo para adultos en albergues y refugios
•  Técnicas de intervención comunitaria orientadas a la recuperación de las redes de soporte social y solución de problemas
•  Estrategias psicosociales para la neutralización del rumor y el manejo eficiente de la comunicación.



* ARTICULOS:

Publicado en 12/04/2013

El pasado día doce de marzo se procedió a la firma del convenio de colaboración entre la Sociedad Peruana de Psicología de Emergencias y desastres (SPPED) y la Sociedad Española de Psicología Aplicada a Desastres, Urgencias y Emergencias (SEPADEM).
La firma de este convenio cierra un periodo de acercamiento y colaboración entre las dos sociedades sin ánimo de lucro, dicho convenio se basa en las premisas de igualdad, reciprocidad y colaboración,  dentro de un marco de gestión del conocimiento en materia de emergencias desde el prisma de recoger, estudiar y analizar experiencias adquiridas por los miembros de dichas sociedades en el ámbito de la psicología de emergencias.
Las dos sociedades, SPPED y SEPADEM, centran su colaboración en  actividades científicas de investigación y desarrollo tecnológico, especialmente en intervención en urgencias, emergencias y catástrofes, así como en el apoyo mutuo en la formación de profesionales en el ámbito de la psicología de emergencias.
Para facilitar el seguimiento y cumplimiento de los Convenios específicos, se constituirá una Comisión Mixta paritaria integrada por un  Delegado Acreditado por la Sociedad Peruana de Psicología en Emergencias y Desastres (SPPED) y un Delegado Acreditado por la Sociedad Española de Psicología Aplicada a Desastres, Urgencias y Emergencias (SEPADEM).
Se abre con este acto una nueva línea de cooperación trasatlántica  dentro de la Piscología de Emergencias, en un mundo cada vez más globalizado e interdependiente, en el que la gestión del conocimiento es esencial.
Breve historia de la sociedad peruana de psicología en emergencias y desastres

Antecedentes

• Socios fundadores 15 psicologos
• Fundacion 1995
• Colegio de ps. Reconoce a la spped 1998
• Evaluacion de incorporacion a bomberos volumtarios del peru departamental de lima 2000 / 2001 Desastres naturales : terremotos, maremotos, imnudaciones, actividad volcanica, deslizamiento de tierras, aluviones.



FACE:  PSIEMEX: PSICÓLOGOS EMERGENCISTAS DE MÉXICO VISIÓN

La labor que realizan los psicólogos emergencistas mexicanos (PSIEMEX) y el equipo de respuesta inmediata de apoyo psicológico (ERIAPSIC), es muy importante, ya que brindan una buena atención psicológica y contribuyen con el bienestar emocional de la persona o sociedad, ayudándolos  a sentirse mejor, después de un acontecimiento traumático. También realizan este tipo de atención en los albergues que tienen a cargo como son los de niños, mujeres y la atención en crisis vía telefónica.

Este tipo de organizaciones que son de apoyo y ayuda para otras personas es muy buena, y por eso el estado debe de apoyarlos más, para poder brindar una mejor atención a las personas.




sábado, 21 de septiembre de 2013

EDAN y EDAN en Salud Mental

¿QUE ES EL EDAN? 

El Manual de Evaluación de Daños y Análisis de Necesidades - EDAN, se ha diseñado, para ser un documento de consulta fácilmente transportable. Que proporcione la información básica sobre las características y efectos de fenómenos naturales que por su magnitud e intensidad generan desastres. Contiene guías de procedimientos y formatos estructurados que permiten efectuar evaluaciones de daños, análisis de necesidades y acciones de respuesta; además contiene información básica referente al empleo de técnicas de recolección de datos y análisis e interpretación de la información georeferenciada. El Manual proporciona asimismo una lista rápida de verificación de daños y de necesidades post-desastre.

¿PARA QUE SIRVE?
Es una herramienta básica que permite conocer la información real de la situación de la emergencia en un escenario definido para la toma de decisiones en la respuesta.
Requisito indispensable en la atención a la población damnificada y afectada proporcionando la ayuda humanitaria correspondiente.
Información que es indispensable en el registro del SINPAD para el monitoreo correspondiente del post impacto.

OBJETO DE LA EVALUACIÓN:

Establecer prioridades de atención que conllevan a la toma de decisiones acerca de dónde, cuándo y qué clase de ayuda debe prestarse en orden prioritario.

EVALUACIÓN DE DAÑOS
La Evaluación de Daños es el proceso de recolección de información referida a la identificación y registro cualitativo y cuantitativo de la extensión, gravedad y localización de los efectos de un evento adverso.

La finalidad, es la de tener la información necesaria para determinar las necesidades que faciliten a los Comités de Defensa Civil, tomar decisiones rápidas y oportunas para atender a la población.

Sus características son: 

*  Objetiva: sólo debe registrar los daños realmente ocurridos y que deben ser considerados.

Oficial: debe ser la voz del Comité de Defensa Civil, de esta forma se centraliza la evaluación en una autoridad   oficial.

Dinámica: además de los daños inmediatos, es necesario proyectar los posibles daños secundarios y las probables necesidades que éstos generan a fin de anticipar sus efectos para la toma eficaz de decisiones.

TIPOS DE EVALUACIÓN DE DAÑOS

• Evaluación Preliminar.- primera apreciación del desastre en forma cuantitativa y/o cualitativa, basada en una aproximación a lo ocurrido, como resultado del impacto del fenómeno en el menor tiempo posible (dependiendo de la magnitud del evento, aproximadamente a las 8 primeras horas); esta información es esencial para tomar decisiones de corto plazo, su principal característica es que por ser inicial requiere un reajuste permanente. Este tipo de evaluación incluye en todos los casos aspectos relativos al fenómeno, daño físico a la salud y edificaciones básicas.

Evaluación Complementaria.- información cuantitativa y/o cualitativa complementaria de los daños y las necesidades relacionadas con la atención inicial de la emergencia, sin sofisticados estudios, que permite identificar en las primeras 72 horas los puntos críticos para las fases de rehabilitación y reconstrucción. Requiere de mayor tiempo y precisiones para elaborarla; contempla la información relativa a los daños a los servicios públicos esenciales y a la producción.

Evaluación Final.- Consolidado de la información sobre los daños y acciones de respuesta de los sectores u organismos componentes del Sistema Nacional de Defensa Civil, como resultado de la recopilación de la información en detalle que cada uno ellos proporciona al INDECI.

¿QUE INFORMAR A LOS MIEMBROS DE UN EQUIPO, NO ADIESTRADOS PREVIAMENTE EN EL METODO EDAN?

• El objetivo de la Evaluación de Daños y el Análisis de Necesidades.
• Los instrumentos de registro que se emplearán.
• Los datos que hay que recoger. Revisar minuciosamente cada componente del formulario, aclarar dudas, no dejar pasar detalles.
• Contactos, posibles fuentes de información.
• Confrontación de datos con otras fuentes.
• Registro en los formularios, tipo de letra, enmendaduras.
• Fecha y hora de los registros.
• Uso de los espacios sobre observaciones.
• Posibilidad de uso secuencial de las fichas auxiliares.
• Complemento en el tiempo, búsqueda de información específica

¿COMO IMPLEMENTAR EL EDAN ANTE UN EVENTO QUE GENERA DESASTRE?

Conformación y Activación del Equipo de EDAN

 * Verificación de la situación

Antes de pensar en la constitución de un Equipo EDAN, deberá comprobarse de antemano la ocurrencia del evento destructivo, localización, población que allí vive y demás datos de información previa descritos (condiciones de acceso, salud, antecedentes sociales y políticos, idiosincrasia de la población, recursos disponibles, infraestructura de servicios, historia de desastres, posibles contactos).



* Identificación del Coordinador de la Evaluación 
Constituye uno de los puntos más difíciles. Deberá ser una persona con capacidad para el manejo de personal, el trabajo en equipo, con iniciativa y constancia, conocimiento del trabajo en desastres y con disposición para el trabajo interdisciplinario e interinstitucional. Será la persona de quien dependa el éxito o fracaso del trabajo.


* Integración del Equipo  (o los Equipos)
Estará compuesto por un coordinador, por un grupo de técnicos o profesionales locales (buscando que sean interdisciplinarios) y, personal de apoyo.

Criterios sugeridos:
·       -  Que conozcan el lugar,
·       -  Que sepan leer, escribir y efectuar matemáticas sencillas,
·       -  Que tengan alguna experiencia en desastres,
·       -  Que tengan experiencia en el tema a evaluar,
·       -  Que tengan tiempo,
·       -  Que tengan voluntad y mística,
·       -  Que tengan respaldo y apoyo.

Estos criterios se deberán obtener como equipo (sumatoria de condiciones individuales)

* Comportamiento 

 Deberá procurarse en todo momento que los miembros del equipo:
·      -   Sean amables,
·  - Tengan una aproximación directa a la población afectada,
·      -   Depongan actitudes prepotentes,
·      -   Mantengan un espíritu positivo,
·    -   No generen falsas expectativas en la gente.

* Transporte
Facilitar o interceder ante otras entidades para que los miembros del equipo o los equipos dispongan del transporte necesario para acceder a las zonas de evaluación. El facilitarle estos aspectos permitirá que el grupo pueda centrarse en su labor sin distracciones.

Telecomunicaciones
Facilitar o interceder ante otras entidades para que los miembros del equipo o los equipos puedan transmitir sus comunicados con la periodicidad establecida.

* Coordinación
Integración y comunicación con los demás equipos que se encuentran trabajando en la zona afectada. Intercambiar información permanentemente. Sincronizar esfuerzos.

* Centralización de los reportes
Es conveniente que el equipo de evaluación de daños comprenda que las instituciones y organizaciones que requieren de su información, presionarán por disponer de ella oportunamente. Al otro lado, el trabajador que está en el campo, frecuentemente olvida su compromiso de reportar, permaneciendo aislado del exterior, bajo el pretexto que sus actividades no le permiten sacar tiempo para comunicarse.

En la centralización de la información, deberá cumplirse con los siguientes criterios:
·    - Objetividad
·    - Oportunidad
·    - Responsabilidad
·    - Cobertura

      BIBLIOGRAFIA


EDAN EN SALUD MENTAL

Evaluación de daños y análisis de necesidades en salud mental en situaciones de desastres
La evaluación rápida de la situación de salud mental después de un desastre o emergencia es parte del EDAN de salud y se constituye en una herramienta que facilita definir, con la mayor objetividad posible, las acciones prioritarias e inmediatas que se requieran en este campo. Incluye el registro cuantitativo y cualititativo de la localización, extensión y gravedad de los efectos psicosociales que produce el desastre; implica, también, determinar la situación de los servicios de salud mental y su capacidad funcional de respuesta.

La evaluación puede ser adelantada por personal de salud local o externo. El personal local, por residir en el mismo sitio, responde inmediatamente desplazándose de manera rápida; generalmente conocen la situación previa al desastre y disponen de mayores elementos de juicio sobre el verdadero impacto del suceso. Sin embargo, la vinculación emocional y la afectación personal pueden comprometer la objetividad de la evaluación. Por lo tanto, es importante que existan instrumentos previamente establecidos y que el personal externo especializado actúe en los procesos de evaluación, de manera conjunta y en forma coordinada con el personal local.

El personal que presumiblemente trabaje en la realización de la evaluación debe ser entrenado con antelación; uno de los requisitos es que esté preparado para trabajar bajo presión.

Para la evaluación en salud mental se toman como período de referencia los primeros 30 días, a partir de la presentación del suceso (periodos crítico y pos crítico inmediato). Este tiempo puede ser variable según la magnitud del desastre y las circunstancias específicas. Se definen tres etapas del proceso:

Inicial: se efectúa en las primeras 72 horas posteriores al evento.

Intermedia: registra la evolución de la situación de salud mental en forma continua durante las primeras cuatro semanas.

Final: se lleva a cabo al finalizar la etapa intermedia.

La evaluación inicial
es comunitaria. La comunidad participa de forma decisiva en la primera respuesta; por tanto, son las organizaciones comunitarias, los grupos de socorro, salvamento y ayuda, y los trabajadores de la salud del nivel primario los que deben efectuar la primera evaluación, la cual debe servir de base al proceso posterior de análisis especializado. Frecuentemente, las condiciones específicas del desastre pueden hacer difícil el proceso de evaluación en estos primeros momentos (acceso geográfico, magnitud del acaecimiento, aspectos culturales, etc.).

Es básicamente cualitativa y general; es difícil trabajar en aspectos cuantitativos o muy específicos. Pretende identificar, de manera rápida, los problemas psicosociales. Es importante que se evidencien cuáles son los factores que pueden influir de manera positiva o negativa en la salud mental de la población, el grado de atención a las necesidades básicas y los recursos disponibles.

Las evaluaciones intermedia y final
Son especializadas. Implican la participación del personal de salud mental, que debe ampliar y complementar la evaluación inicial comunitaria. Debe ser cualitativa y cuantitativa, definir con mayor precisión la situación existente y registrar las acciones tomadas.

EL PROPOSITO
es proporcionar un instrumento práctico para analizar los daños y evaluar las necesidades psicológicas y sociales de la población afectada por un desastre (natural o provocado por el hombre), en el periodo inmediato posterior al mismo (30 días).

ANTES DEL EVENTO

El disponer de un análisis de la situación de salud mental previo al desastre facilita realizar la evaluación con mayor precisión y calidad.
- En los preparativos para la respuesta (antes del desastre) se recomienda disponer de un diagnóstico o análisis actualizado de la situación de salud mental un mapa de riesgos psicosociales y recursos de salud mental.
- En los planes de emergencias y en las salas situacionales debe incorporarse el componente salud mental.
- De no existir la información antes señalada, debe realizarse un esfuerzo por recopilar los datos prioritarios (que sean factibles de obtener

OBJETIVO
1. Describir el impacto humano del evento adverso, destacando los aspectos culturales, las coyunturas políticas y las formas de organización social existentes en la población afectada.

2. Identificar la problemática de salud mental, incluidas la morbilidad y la mortalidad.

3. Evaluar las necesidades psicosociales prioritarias de la población afectada.

4. Describir las formas de respuestas institucionales (planes y servicios de salud mental existentes) y de la población; así como la eficacia de los mecanismos de afrontamiento.

5. Hacer recomendaciones para la acción.


PRINCIPALES SINDROMES QUE SE PRESENTAN DESPUES DE UN DESASTRE:

Categoría por síndromes
Manifestaciones fundamentales
Estrés agudo/cuadros predominantemente ansiosos.
Nerviosismo, temblor, angustia, miedo, aflicción, revivir el momento traumático, intranquilidad, insomnio, trastornos del apetito, temor a la réplica
Cuadros depresivos.
Tristeza, llanto frecuente, baja autoestima, pérdida del sentido de la vida, trastornos del sueño, insomnio, falta de apetito; pueden existir ideas suicidas.
Ideación o conducta suicida.
Pocos deseos de vivir o ideas suicidas definidas, existencia de planes para consumar el suicidio, actos suicidas fallidos; frecuentemente coexisten manifestaciones de depresión.
Psicosis.
Alucinaciones, ideas delirantes, conductas extrañas o evidentemente anormales que evidencian desconexión con la realidad; puede existir agitación y violencia.
Consumo indebido de sustancias psicoactivas.
Inicio o aumento en el consumo de alcohol u otras drogas, como consecuencia del evento.
Epilepsia y cuadros orgánicos con manifestaciones confusionales o sin ellas.
Convulsiones o cuadros de confusión mental/desorientación (no saber en dónde está momentáneamente, quién es, qué pasó, etc.) asociados a infecciones, intoxicaciones, traumas craneales, etc.
Trastornos emocionales y conductuales de la niñez.
Enuresis, encopresis, aislamiento, miedo, hiperactividad, agresividad, cambios de conducta evidentes, trastornos del sueño o la alimentación, conductas regresivas y aparición de dificultades en el aprendizaje.
Manifestaciones emocionales no definidamente patológicas.
Nerviosismo, tensión, tristeza, preocupación, aflicción, temores, pensamientos desordenados, síntomas somáticos, sentimientos de culpa, irritabilidad, recuerdos persistentes, frustración, problemas de sueño y alimentación, cambios en las formas habituales de conducta, ruptura conyugal, otros.
Conductas violentas.
Agresiones, maltrato a miembros de la familia, ira, cólera, enojo, rabia; la conducta violenta puede darse en el seno de grupos delictivos.
Cuadros somáticos en que los factores emocionales juegan un papel etiopatogénico importante.
Diabetes, hipertensión arterial, dermatitis, asma u otras enfermedades psicosomáticas.

En este video podremos apreciar los testimonios de algunas personas afectadas en el terremoto de Pisco - Ica del 2007: aquí se vera de que manera ellos reaccionaron y como se sintieron en ese momento. Esto es algo muy interesante para analizarlo.

   
   Bibliografia